un rayo de esperanza

Tuve un ataque muy grave. El cirujano les dijo a mis padres que el 99% de las personas con un aneurisma roto mueren en la mesa de operaciones. Así que pasé esta prueba y mi rehabilitación de forma positiva. No necesitaba tomar sustancias que me hicieran olvidar mi discapacidad. No quería decepcionar a mis antepasados. Para saber más sobre mi viaje, te invito a leer mi libro.

Tenía una vida normal y plena: trabajaba, viajaba, hacía deporte. Tenía una novia y una pequeña mascota. Un día en el que no se vislumbraba nada oscuro, mi vida dio un vuelco el 17/01/2017. Sufrí una rotura de aneurisma y salí con algunas secuelas. Tuve que volver a aprender todo y vivir con mi discapacidad. Tuve la suerte de conservar a mis amigos. Las personas que me rodeaban no cambiaron ni modificaron su comportamiento. Tuve que someterme a rehabilitación para volver a aprender todo durante más de 2 años. Mi "historia" comienza en una ciudad cercana a Barcelona y termina en una ciudad del sur de Francia. He tenido la suerte de conocer a gente estupenda que nunca habría conocido en mi vida anterior.

Desde hace algún tiempo tengo la sensación de que estoy empezando una nueva vida y renaciendo. Nací un 29 de noviembre de 1981 y vuelvo a nacer oficialmente el 29 de noviembre de 2019 (el día que recibo mi libro). Un símbolo deseado.

Quería dar las gracias a todas las personas con las que he tenido que tratar durante mi recuperación. Mi ex novia, que con su firma me salvó la vida, y mi familia y amigos, que estuvieron presentes en todas las etapas de mi accidente.

Hoy estoy haciendo cosas que seguramente no habría hecho antes. Mi discapacidad me permite superarme y tener objetivos.

Vivo cada día con las consecuencias de un accidente. 1/3 de mi cerebelo estaba dañado.

He pasado por muchas situaciones de descalificación. Comprendo perfectamente las dificultades de todas las personas que sufren un problema de salud porque las he vivido. Mi estado de ánimo me hizo tomar la pequeña oportunidad que tenía, como una oportunidad. Sin embargo, creo que irse también es una forma de suerte porque evita sufrir o pasar un calvario. Lo más duro será para la gente que te rodea pero la persona que se va deja de sufrir. No es fácil depender de los demás. Así que debemos pensar primero en el "beneficio" de la persona.

Esta es una reflexión que sólo me atañe a mí, pero creo que es importante intentar obligarse a avanzar. Sólo a través de las dificultades podemos progresar. Así que mi consejo es que hagas cosas que pueden parecer imposibles pero que no lo son cuando las quieres. Esto hará que te sientas orgulloso de ti mismo.